¡Qué vueltas da la vida! ¿Pero qué haces tú aquí?
¿Es que ya no te acuerdas? Nos vimos en Berlín.
Fue una madrugada de aquel invierno hostil
en una mazmorra a punto de morir.
No sabes si llorabas de rabia o de dolor,
yo vi caer tus lágrimas entre sangre y sudor.
Fue sólo ayer cuando el nazi disparó en tu sien,
sólo ayer, el campo de concentración, sí,
fue sólo ayer, tortura y persecución,
fue sólo ayer, suplicando de rodillas tu perdón.
¿Ahora quién? ¿Quién es el asesino?
¿Ahora quién? ¿Quién mata sin razón?
¿Ahora quién utiliza las torturas?
¡Ahora tú, JUDÍO CABRÓN!