No queríamos irnos de vacaciones sin antes dejar esta nueva y refrescante lista de versiones extraídas de discos que ya han sonado por aquí en el último año y medio, pero nos fuimos de vacaciones, y volvimos... y nos lo hemos seguido tomando con calma hasta hoy. Con la intención de convertir esto en un pequeño juego de espejos y simetrías deformes hemos incorporado también a la lista las canciones en su versión original.
Esto es lo que vas a oir, y en este orden, si le das al play.
Intronautas recogieron nueve versiones en el disco Las Canciones Que Les Convirtieron En Lo Que Son. Una de ellas fue La Estación Fantasma de Los Coyotes, a la que aplican electricidad y algo de sobreactuación. También acabó en el recopilatorio Nunca Conocí A Los Intronautas.
El Niño Gusano, siempre esclarecedores y sorprendentes a la hora de hacer versiones, repescaban y sacaban brillo a Las Venas De Mi Amigo Están Ardiendo de Polansky Y El Ardor. Acordándose en los noventa de la por aquellos años denostada década anterior.
La Buena Vida se atrevía con este clásico de Alaska Y Dinarama en el Homenaje A Alaska que editó Criminal Records en 2002. Le rebajan la épica y el reproche pierde fuerza, la verdad que se hace raro escucharla en esta versión quizás demasiado parsimoniosa. También se recogió en el recopilatorio de singles y rarezas del grupo que llevó por título Sencillos.
Esperit!, espíritu libre recogía, en su poliédrica presentación en sociedad esta canción del ilustre Pau Riba. Le añade una intro, cuenta con la ayuda de Maria Rodés a la voz y la convierte en una delicada miniatura-boceto que se quiebra según avanza. Al año siguiente, el propio Mau participaría en los conciertos que dio Pau para celebrar el 40 aniversario de la edición del disco original.
En su primer registro en directo, Anari se lleva a su terreno esta canción de Dut con letra de Martxel Mariskal. Emoción, rabia contenida e inyección gradual de electricidad para llegar a la calma final. Aplausos merecidos.
El segundo disco de Dut, mi favorito de la banda, claustrofóbico y monolítico. Disco de los que te deja un nudo en el estómago, supuso el comienzo de un apasionante viaje en el que no mucha gente estuvo dispuesta a acompañarlos.
Después de Dioptria / 2, Pau Riba emigraba a Formentera y desde allí, dedicado a la contemplación, nos enviaba un disco-postal que ha tardado muchos años en ser comprendido y estimado como es debido.
Clásico entre los clásicos del grupo y uno de los tantos motivos por los que Deseo Carnal es uno de los mejores discos de pop grandilocuente hechos en este pais.
Polansky Y El Ardor fueron algo más que aquellos que tocaban lo del Ataque Preventivo De La URSS, aunque en los noventa nadie se acordaba del resto de su repertorio, que igual se vio lastrado por el sonido que consiguieron en su primer y único largo, Chantaje Emocional.
La estupenda La Estación Del Amor, editada en 1987, fue primero La Estación Fantasma, y cual cortometraje de terror de serie Z apareció en el primer single de Los Coyotes.
Supergrupo de arrollador rock'n'roll, con raíces en Malasaña, formado por gente que ya había pasado por The Fallen Idols, Ilegales, Sex Museum y muchas otras bandas. En su úico disco se atrevieron con Burning, y también con Parálisis Permanente.
Ehun Ginen es seguramente más conocida por esta versión que hicieron Kortatu para su tercer disco en estudio que por la original de M-ak. El disco de los hermanos Muguruza y Treku que presagiaba el cambio, también reivindicaba a los de Xabier Montoia y Kaki Arkarazo.
Los canarios grababan su peculiar versión de Siniestro Total, mención a Lola Flores incluida, para el que iba a ser su primer disco largo, que al final hubo que rescatar muchos años después.
Encefalograma Plano me imagino que tomaron su nombre de esta canción de Kante Pinrélico, y hasta dos veces la maltratan en el concierto que grabaron en el Blues Bar de La Laguna.
Los de Barcelona reducen al estribillo la canción de Manolo Kabezabolo para convertirla en otra pesadilla de ruido y angustia.
Manolo Kabezabolo se convirtió en una institución desde su maqueta De Empalmada… Cantautor punk, se decía en aquella época, que cayó en gracia a todo el mundo, yo por aquel entonces era más de Albert Pla. Su debut, rápidamente cercenado por incluir no sé cuantas versiones sin acreditar, escuchado ahora tiene su gracia.
Los cartageneros tardaron muchos años en conseguir plasmar su manojo de clásicos en un disco oficial, que ya pasaban de mano en mano y de cinta en cinta al menos desde 1992. Punk de psiquiátrico.
Todavía con Germán Coppini al frente, los gallegos entregaban su primer largo de punk irreverente y ajeno a cualquier consigna política. Provocación y diversión destartalada que caló hondo entre sus contemporáneos.
Siempre calificados como uno de los secretos mejor guardados de Euskadi, su peculiar sonido ajeno a las tendencias que llegaban por aquellos años desde su tierra hizo que nunca tuvieran demasiados adeptos ni dentro ni fuera de sus fronteras. Entre la nueva ola, el funk, el rock y cierto nervio post punk y experimental, que Nuevos Medios les echara el ojo no fue casualidad.
Clásicos del rock de este país, su segundo disco es de los más queridos por sus seguidores, aunque yo prefiero el siguiente, Bulevar. El Fin De Una Década casi se ha convertido en canon y vara de medir para todo lo que ha llegado después en lo que a rock cantado en castellano se refiere.