Me enteré que existía el Record Store Day hace dos años por culpa de este disco. Me hizo bastante gracia que El Día De Las Tiendas De Discos coincidiera con mi cumpleaños, y de alguna manera me sentí aliviado, no podía eludir mi destino, nací para comprar y escuchar discos. Boberías aparte, creo que fue el primer año que la iniciativa tuvo repercusión en nuestro pais, la primera vez que alguien se decidía a editar algo para conmemorarlo, y tuvieron que ser cuatro sellos los que aunaron esfuerzos para editar este single. Cuatro grupos que representan a cada una de las escuderías, cuatro portadas diferentes y cuatro formas de hacer pop.
Evripidis And His Tragedies se marcan un tema lustroso que bebe del pop primigenio actualizado vía los ochenta con alma de auténtico hit de radiofórmula.
Sundae tiene los versos más bonitos y certeros del disco, los más emocionantes, los que mejor describen las tonterías que se decían con el corazón cuando uno era joven.
Dënver aportan delicado pop melancólico que combina bases electrónicas, elementos orgánicos y voces oníricas que susurran. Dream-pop lo llaman, ¿no?
Zona Negativa entregan un pedacito de electro pop chispeante, contagioso en el estribillo y efervescente en el resultado, alegre y urgente, aunque hable de despedidas.
Incluye un breve texto interior escrito por César, que no sé muy bien quién es en toda esta historia, enumerando algunos recuerdos de momentos pasados en tiendas de discos.
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