Leone, con tan solo seis canciones publicadas, cuatro en un 10" autoeditado el año pasado, y dos en el single que hoy tenemos encima de la mesa, son el siguiente eslabón que doy por bueno para añadir a esta cadena, desgraciadamente llena de infortunios, a la que hacía mucho tiempo que no encontraba nada con el suficiente fundamento para seguir engarzando. Y con esto, ya debería estar todo dicho.
Aunque claro, puede ocurrir que ustedes no hayan escuchado ninguno de los discos mencionados más arriba, incluso puede ser que ni les suenen, y entonces a estas alturas del texto estarán como al principio, sin saber muy bien a qué atenerse. Pero esta incertidumbre no es lo más grave, el problema serio es lo que se están perdiendo.
Leone se forma en Madrid, cuando Jesús Canet decide montar una banda con músicos de la ciudad. Anteriormente operaba desde Almería con Motel 3, pero su traslado a la capital, y unas canciones que había hecho y que no encontraban su hueco en el repertorio de la banda, lo llevaron a asociarse con Juan Pérez Marina, Jesús Rodríguez y David Talbaila para darles salida en un nuevo proyecto de cinematográfico apelativo. Con esta formación grabaron sus seis canciones, aunque a la hora de ver la luz este single ya estaban incorporados a la banda el percusionista Rubén Lizana y Jesús Alonso, que sustituye a David a la batería.
En este disco Leone facturan dos preciosas canciones con aromas de lamento y trifulca, sobrevoladas por el amor. La voz de Jesús Canet y las letras destilan cierta chulería, entre la arrogancia y la sabiduría popular, situando los dos temas aquí presentes muy arriba en mi lista de canciones que hay que cantar con la camisa a medio desabrochar y las botas puestas. Rocanrol fronterizo, desértico pero también surfero, con guitarras elegantes a la vez que devastadoras, que en algún momento me recuerdan a la cinta de Los Relámpagos, Dos Cruces creo que se llamaba mi tema favorito, que me ponía mi padre.
Ahora que ya las palabras han intentado decir algo, lo demás queda en sus manos. Si realmente quieren saber de qué estamos hablando, pueden empezar por la canción que les dejo a continuación y si es de su agrado, sigan los eslabones, no se arrepentirán.
Ahora que ya las palabras han intentado decir algo, lo demás queda en sus manos. Si realmente quieren saber de qué estamos hablando, pueden empezar por la canción que les dejo a continuación y si es de su agrado, sigan los eslabones, no se arrepentirán.
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